domingo, 27 de junio de 2010

La Luna pasó


Y la Luna pasó, casi sin pensarlo, casi sin saberlo, pasó con su hermosura y su sabiduría mirándonos impasible desde su lejana morada celestial. A su paso las estrellas se ocultaban eclipsadas por su radiante belleza. Y todos nosotros pensamos en lo efímero de nuestra existencia al saber que nos contempla desde el albor de los tiempos...y a la vez nos hace sentir a todos iguales porque todos de igual manera contemplamos su belleza inmaculada.
La Luna y su influjo de amor, de odio, de locura, de esperanza, de pasión...Marcando estaciones y mareas de la misma manera que marca nuestras terrenales vidas. Lo que daríamos por abrazarla y sumirnos en su eternidad.

viernes, 25 de junio de 2010

No te importo

No te importo, asúmelo, yo lo he hecho, nunca te he importado, en algún momento de la vida parecía que así era y me dejé llevar, pero lo único que de verdad te importaba eras tú, tus sentimientos, tus metas, tus cumbres, tu honor y tu dolor. No te importa mi dolor, ni mi felicidad ni mi persona, porque a ti, realmente, no te importa nada. No te importa si lloro o si río, si me caigo y si puedo volver a ponerme en pie, no te importa que sufra o que sea feliz, porque tú ya tienes lo que viniste a buscar así que ya da igual. Da igual todo, lo que fue y lo que pudo haber sido queda en un recuerdo de una tarde de verano junto al mar donde con dedos temblorosos escribías palabras en mi espalda que yo malinterpretaba. Pero existe un problema, pasa, que cuando la mente da órdenes al cuerpo éste las obedece de manera inmediata, pero cuando la mente se da órdenes a si misma se producen contraindicaciones...así que me encuentro en un estado en el que tú me importas y yo no tanto, y aun siendo consciente de que tú no me quieres ni lo has hecho nunca, mi mente irracional se niega a colaborar. Poco a poco pasarás a un baúl de sentimientos perdidos en el fondo del trastero que es mi vieja cabeza, y algunas tardes de verano, mientras jugueteo con mis canas mirando al mar que me vio nacer, abriré ese baúl de recuerdos perdidos y rescataré esos sentimientos que una vez fueron tuyos.

lunes, 21 de junio de 2010

Errores


La vida está llena de errores, que cometemos, q cometen contra nosotros...de tonterías, de decir SI cuando quizá deberías decir NO o viceversa. Se dice q de ellos se aprende, pero es mentira, volvemos a caer, una y otra vez de manera irremediable, porque, aunque pensemos lo contrario, el ser humano no tiene memoria, solo nos acordamos de lo que nos interesa, de los buenos momentos y las buenas sensaciones, pero no del vacío que se te queda dentro cuando descubres q t has equivocado, y que has herido. Pero aun así, las cosas hay que hacerlas, la vida se mide por momentos y toma de decisiones, grandes y pequeñas, pero todas importantes, porque cada una de ellas hacen que tu vida tome un rumbo u otro. Yo he cometido muchos errores en mi vida, y seguiré cometiendolos porque soy humana y puesto q así es, imperfecta, aunque los haya (cada vez menos) que piensen que la perfección me ronda. La perfección solo está en los ojos de quien mira, y hay ojos que deberían someterse a una profunda graduación visual.
Pido perdón a todos aquellos a los que en algún momento herí, seguro que no lo merecieron.

jueves, 10 de junio de 2010

...

Saludas. Levanto la vista y te miro. Sonríes y no dejas de caminar. No soy capaz de articular ni una sola palabra y te respondo con un movimiento de cabeza. Tonto, soy tonto. Vuelvo la cabeza y te veo marchar. Tu pelo se mueve al compás de tus caderas. Me encantas. Intento seguir a lo mío pero es difícil cuando ya no puedo apartarte de mi mente. Pasan los minutos y rezo para que vuelvas a pasar a mi lado. Voy en tu busca, casi sin quererlo, casi de manera inconsciente, voy a tu encuentro. Atravieso el puente sobre el estanque. La luz del sol de la tarde hace que el estanque se transforme en mágico...ahí estás, en tu banco, charlando con alguien que se ha acercado a ti después de oirte tocar. Le sonríes. Le odio. Giras la cabeza y me miras. Tus ojos vienen a mi encuentro. Mueves la cabeza a modo de saludo y yo levanto la mano. Estoy paralizado. El extraño se va. Miras tu violín y tocas sus cuerdas. Te muerdes el labio y yo me vuelvo loco. Ya está, es definitivo, me he enamorado. Daría un mundo porque me tocarás como tocas tu instrumento, daría la vida por notar tus labios sobre los míos. Tocas. Me acerco.El corazón se me va a salir del pecho. Eres magia. Lucharé contra los dragones y las quimeras, me adentraré en bosques imposibles, pisaré castillos encantados...todo solo porque tú también me ames.

la tarde

La luz del ocaso se filtraba a través de la persiana. Al despertar, tuvo que tomarse un tiempo para recordar dónde estaba: en la habitación de un hotel, en la cama, junto a él. Se dio la vuelta y le miró, dormido, la respiración pausada, tranquila, los labios ligeramnete separados, el pulso se adivinaba a través de la piel de su cuello y su pecho moviéndose al compás de la respiración. Aun pequeñas gotas de sudor se veían en su cuerpo y por toda la habitación se podía sentir el característico olor del sexo...Si cerraba los ojos por un instante podía sentir sus manos recorriendo su cuerpo ansiosas de crear recuerdos, de atrapar todo lo que había estado meses deseando tocar, besar, lamer...Recorrió con la yema del dedo su cuello y lentamente bajó entre sus clavículas, su pecho hasta llegar a su ombligo...él se estremeció y abrió los ojos, ella retiró la mano y se miraron, sonrieron haciéndose eco de lo sucedido, cómplices de una batalla de caricias acabada en tablas. Él se incorporó, la acercó hacia si y la besó, dulce boca que la llevaba hasta lugares que no había soñado hasta entonces. Solo el contacto de sus labios fueron suficiente para desencadenar la máquina del deseo nuevamente en su interior. Quería que esa dulce sensación no acabara nunca, deseaba que esa tarde no tuviera fin.

ya no

He aprendido a vivir sin ti, sin tus miradas, sin tus caricias, he aprendido a vivir sin esperar una llamada, una palabra. Ya no me vuelvo loca pensando qué habré hecho para merecer tus desprecios, ya no miro incesantemente a la puerta esperando ver aparecer tu sonrisa, ya no soy la misma niña que cuidaba al detalle cada movimiento para que tú lo aprobases, ya no. ¿Por qué? te preguntarás, te lo voy a decir: porque por mi primera vez me miro y me gusta lo que veo, porque me gusta lo q tengo, porque soy fuerte y por fin lo sé, porque no te necesito, ni a ti ni a tus falsas promesas y tus juegos de seducción, se acabó, me levanto y me voy porque merezco más de lo q tú eres capaz de ofrecerme, que es muy poco. Ya no volveré la vista atrás para saber si me sigues con la mirada, porque no me importa hacia donde se dirijan ahora tus ojos, ya no lloraré, ya no sufriré, ya no volveré a imaginar una y otra vez el roce de tus labios con los míos, ya no pensaré en tus manos recorriendo mi cuerpo. Se acabó, porque ahora, por fin, sé quien soy, y no soy tu sombra y no lo seré nunca más, porque ahora soy luz.